Iglesia

Papa Francisco: el mundo en alerta por sus complicaciones en la hospitalización

El mundo ora por la recuperación del papa Francisco. La neumonía que padece tiene en vilo a la comunidad católica, pero a pesar de las nuevas señales de alerta también hay razones para la esperanza.

1 de marzo de 2025, 5:16 a. m.
El papa Francisco se encuentra hospitalizado desde el pasado 14 de febrero luego de complicaciones respiratorias.
El papa Francisco se encuentra hospitalizado desde el pasado 14 de febrero luego de complicaciones respiratorias. | Foto: getty images

El Vaticano y el planeta están en vilo desde el pasado 14 de febrero cuando el papa Francisco tuvo que ser hospitalizado en el Policlínico Gemelli en Roma. Desde ese momento, el mundo católico se ha unido en una sola oración por la recuperación del sumo pontífice, cuyo pronóstico es complejo: a sus 88 años padece una neumonía bilateral. Con un agravante. En su juventud tuvo un cuadro complejo de salud que lo llevó a la extirpación de medio pulmón. La infección ha intentado ganar terreno y ha amenazado a otros órganos. El pasado fin de semana, el riñón comenzó a flaquear, pero su cuerpo respondió.

La salud del papa tiene al mundo a la expectativa. Con el paso de los días, el Vaticano informa sobre su estado. Hay un reporte en la mañana y otro en la tarde. Algunos son escuetos, otros tienen algún símbolo de esperanza. “Pasó bien la noche”, “descansó”, “desayunó”. Cualquiera de esas expresiones lleva alivio a los cerca de 1.400 millones de católicos bautizados que hay en el planeta, pero quizás a muchos más que reconocen al papa Francisco como uno de los líderes más entrañables e inspiradores de los últimos tiempos.

No obstante, hay otros anuncios que preocupan. La última alerta sucedió el viernes cuando el papa sufrió una “crisis de broncoespasmo”. La neumonía del papa es una enfermedad traicionera que en cualquier momento puede complicarse. Se trata de “una infección polimicrobiana del tracto respiratorio, ocurrida en un contexto de bronquiectasia y bronquitis asmática”, según los médicos italianos al tanto de la situación. El riesgo es que la enfermedad trascienda a una sepsis, una infección grave en la sangre que ocurre por complicaciones como la neumonía y puede terminar en la muerte. La Sociedad Italiana de Anestesia, Analgesia, Reanimación y Cuidados Intensivos (Siaarti) dijo: “No está claro si se trata de un cuadro de sepsis, pero si así fuera, ya estaría bajo control gracias al inicio oportuno de la terapia antibiótica”.

Los feligreses rezan por la salud del papa. | Foto: ap

Los médicos que lo atienden anunciaron, en una rueda de prensa la semana pasada, que la salud del líder de la Iglesia únicamente puede definirse como delicada. El profesor Sergio Alfieri, jefe del equipo médico del pontífice, fue claro al afirmar que “el papa no está fuera de peligro”. Luego aseguró que Francisco es un “paciente frágil”, pero que se encontraba “de buen ánimo” y que ha bromeado con el personal médico.

Hay razones también para la esperanza. Los últimos comunicados reportan una “leve mejoría”. El pasado martes, el pontífice fue sometido a una tomografía de tórax, que “mostró una evolución normal de la inflamación pulmonar”, basada en el contexto de una persona que está en tratamiento de neumonía pulmonar. De acuerdo con el equipo médico, “los análisis de sangre y hematológicos confirmaron la mejoría”, en comparación con resultados anteriores. Esto representa una buena noticia para el papa como paciente, quien estaba padeciendo de anemia y déficit de plaquetas.

En los mismos informes, los médicos han asegurado que Bergoglio “continúa con oxigenoterapia de alto flujo” y, hasta ese momento, había dejado de presentar crisis respiratorias asmáticas. Sin embargo, han concluido cada reporte con que “el pronóstico sigue siendo reservado”.

Durante su estancia en el hospital de Roma, el santo padre no ha recibido visitas más allá del equipo cercano del Vaticano y el personal médico que lo atiende. Pero se ha comunicado que “no ha habido otras transfusiones. El papa se alimenta con normalidad. Necesitaba cánulas de oxígeno, pero no está intubado de ninguna manera”, según funcionarios del Vaticano. Y, aunque alejado, se mantiene al tanto de las oraciones de sus seguidores, que ha agradecido profundamente.

Así, el papa emitió un mensaje escrito para la oración del ángelus dominical durante su hospitalización, en el cual aprovechó para decir: “Continúo con confianza mi internación en el Policlínico Gemelli, realizando los tratamientos necesarios. ¡Y el descanso también es parte de la terapia! Agradezco sinceramente a los médicos y al personal sanitario de este hospital la atención que me demuestran y la dedicación con que desempeñan su servicio entre los enfermos”.

Mientras su internamiento continúa, cientos de fieles se han reunido en oración para pedir a Dios la mano salvadora que lo cure pronto. Las imágenes frente al policlínico son conmovedoras. Centenares de religiosos, sentados en bancos frente a la estatua de Juan Pablo II que decora la entrada de la institución médica, han pasado horas rezando. Este lugar se ha convertido, en las últimas semanas, en una especie de altar decorado con flores, imágenes de santos, velas intencionadas, fotografías del papa, dibujos, oraciones y rosarios, señales de apoyo y compañía en momentos de crisis para el líder religioso.

“Ustedes saben que como comunidad estamos ofreciendo momentos intensos de oración, de adoración eucarística, de misa, del rosario, por la salud del santo padre. Y así seguiremos porque me parece que está teniendo algún efecto positivo”, afirmó el capellán del hospital, Agostino Gemelli, al celebrar la misa del mediodía. “Sabemos lo importante que es la terapia espiritual, la de la Eucaristía”.

 Cientos de fieles se han reunido en oración para pedir a Dios por la pronta recuperación del pontífice.
Cientos de fieles se han reunido en oración para pedir a Dios por la pronta recuperación del pontífice. | Foto: getty images

En Argentina, la tierra natal del sucesor de san Pedro, también se han organizado encuentros para que los católicos rueguen por la estabilidad del santo padre. El sacerdote Claudio Caruzo, quien conoce al papa desde hace 28 años, sigue día tras día las evoluciones en su salud, y a más de 10.000 kilómetros de distancia ha mandado sus mejores deseos. “Francisco quería que se dijera la verdad, pero esa verdad sobre su salud ha dolido a quienes lo quieren, es decir, a la mayoría de los argentinos. La gente está rezando por todos lados”, aseguró al medio italiano La Reppublica.

El presidente Gustavo Petro, por su parte, también envió un mensaje. En este se refirió a él como “un amigo de verdad”, con el que mantuvo conversaciones “en momentos difíciles”. “Para mí, es un compañero de lucha, de viaje, de historia y de continente. Es un jefe de la humanidad y mío en este momento en el que la vida está en peligro y puede extinguirse en todo el planeta por la codicia”, escribió. Finalizó diciendo que confía en que “no se vaya mi compañero del alma”.

En los 11 años que el papa ha sido inquilino de la Santa Sede, se ha convertido en el pontífice más cercano a la sociedad y sus necesidades, lo que también ha sido controversial para los religiosos más conservadores. El papa Francisco no ha sido ajeno a los cambios generacionales, siempre se ha presentado como un defensor de los más pobres y ha alzado la bandera del perdón generalizado para toda la humanidad. Jorge Mario Bergoglio, a sus 88 años y en su cuarta hospitalización, siempre se ha mostrado ante los fieles como un ser amable y feliz. “Recen por mí”, ha sido el pedido del líder de la Iglesia católica.

Noticias relacionadas