Inglaterra no es solo brexit: le declaró la guerra frontal al plástico

Los pitillos, mezcladores y copitos de plástico estarán prohibidos en Inglaterra desde abril de 2020, una de las medidas para disminuir drásticamente los residuos plásticos.

Según funcionarios de medio ambiente de Reino Unido, la prohibición fue confirmada luego de una consulta abierta al público.

La medida, que había estado en el tintero, confrontará los casi 5.000 millones de pitillos de plástico que se usan anualmente en el Reino Unido, así como 316 millones de mezcladores y 1.800 millones de copitos. Se calcula que el 10% de estos residuos se arrojan a través del inodoro.

De las alternativas propuestas, se incluye servir bebidas sin pitillos o mezcladores, o de ser necesario, utilizar pitillos de papel y productos biodegradables para reemplazar mezcladores y copitos de algodón.

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No obstante, habrá excepciones a la regla para las personas con una necesidad médica o discapacidad, que podrán acceder a los productos por pedido. Igualmente con farmacias registradas autorizadas para venderlas y restaurantes, mientras pubs y bares que los tengan en su inventario podrán proporcionarlos a los clientes que lo requieran.

Una encuesta gubernamental de Reino Unido halló que más del 80% de los encuestados apoya la prohibición de la distribución y venta de pitillos de plástico, mientras que nueve de cada 10 personas querían una prohibición de los mezcladores de bebidas, y un número similar apoyaba la prohibición de los copitos de algodón con mango de plástico.

“Se necesita una acción urgente y decisiva para combatir la contaminación plástica y proteger nuestro medio ambiente”, señaló el secretario de Medio Ambiente, Michael Gove.

“Estos artículos a menudo se usan solo por unos minutos, pero tardan cientos de años en descomponerse, terminando en nuestros mares y océanos y dañando la preciosa vida marina”.

Se espera que las medidas puedan reducir la contaminación plástica en los océanos, que mata a más de 100.000 mamíferos marinos y un millón de aves cada año.

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De acuerdo con el comunicado, hay 150 millones de toneladas métricas de plástico en nuestros océanos, y esa cifra se triplicará para 2025.

“Detener la producción y distribución de estas amenazas plásticas de un solo uso evitará que contaminen las playas de todo el país”, indicó Hugo Tagholm, CEO de Surfers Against Sewage.

“Es un paso realmente positivo y audaz en la dirección correcta en la batalla contra la contaminación plástica”, añadió.

El siguiente incluye un impuesto propuesto en Reino Unido para los envases de plástico con menos del 30% de contenido reciclado, que actualmente se encuentra en un período de consulta.

Esta es una tendencia global a la que se están sumando diversas partes. 187 países acordaron a principios de este mes controlar el movimiento de desechos plásticos entre las fronteras nacionales, aunque Estados Unidos no estaba entre ellos.

La decisión evitará que los países desarrollados envíen sus desechos plásticos a los países en desarrollo para su eliminación, lo que, según los activistas, ha convertido a estos últimos en “vertederos”.

Para el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), el nuevo movimiento internacional es “un paso muy positivo para corregir este desequilibrio y restaurar una medida de responsabilidad ante el sistema global de gestión de residuos plásticos”.

Los gobiernos (descentralizados) de Escocia y Gales también están considerando medidas similares.

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