James Rodríguez confesó intimidad y primer ‘no’ que le dieron en León: lo contó en vivo

Por tercer partido desde su llegada a México se vio como titular a James Rodríguez. Esta vez, en la victoria de los suyos por 1-2 ante Pachuca, lo que les permitió tomar el liderato de la Liga MX con 15 puntos.

El 10 colombiano estuvo a lo largo de todo el compromiso, demostrando, una vez más, que se encuentra a plenitud física. Además de eso, en su rol de conductor de las fieras, siguió aportando en defensa, tanto como en ofensiva, lo que derivó en una calificación de 7,2 puntos.

El complicado partido que sacaron adelante en el estadio Hidalgo requirió los mejores hombres al servicio del entrenador Eduardo Berizzo, quien al segundo tiempo hizo una variante y dio el ingreso al otro referente, Andrés Guardado.

Suele pasar que cuando el estratega argentino da ingreso al histórico de la Selección de México, James sale y se intercambian la cinta de capitán, para mostrar el respeto que se tiene el uno por el otro como referentes del plantel.

Sin embargo, esta vez el escenario fue distinto. Guardado pisó el campo restando 20 minutos para acabarse el juego, en lugar de Rodrigo Echeverría, lo que no sacó de circulación al colombiano como solía darse.

Al estar los dos en cancha (James y Guardado), el 10 se dispuso a entregarle una vez entró el brazalete a quien sería el capitán número uno del Club León. Sorpresivamente, el mexicano se negó a que fuese así e indicó a Rodríguez que se mantuviera con él.

Aunque no es una escena negativa, para la prensa mexicana llamó poderosamente la atención que Guardado se negara, pues, para ellos, su trayectoria en el balompié manito lo hacía completamente merecedor de quitarle la capitanía al colombiano.

En las entrevistas pospartido, la prensa tuvo la oportunidad de hablar con el cucuteño, a quien le consultaron sobre la situación mencionada.

James, con total sinceridad, relató que intentó entregárselo, pero recibió el ‘no’: “A Andrés (Guardado), tengo respeto por él por lo que ha conseguido, le dije que si quería (el gafete de capitán), dijo que no”.

Más allá de verlo como un inconveniente, el colombiano resaltó que los egos no son protagonistas en el plantel que integra: “Es un grupo sano, bueno, los muchachos me han recibido bien, es una familia, estoy feliz”.

Después de aclarado el suceso, ya hizo referencia más a lo netamente deportivo, palpitando el próximo partido ante Toluca: “Estamos pasando por una buena fase, cinco partidos ganados y ya hay que pensar en el sábado, que va a ser duro”.

Haciendo algo de autocrítica, aceptó que se vieron superados en el primer tiempo: “Felices, ganamos un partido duro. Ellos en el primer tiempo lo manejaron. Hay que corregir cosas, falta mucho”.

Para terminar, a James le mencionaron que el León en su historia jamás logró ganar cinco juegos consecutivos al inicio del certamen y ahora lo consiguió con él siendo parte del plantel.

Atónito sobre lo que le estaban contando, dijo: “No, ¿no? ¿Así empezando? Pues bien, ¿no? Los récords están para romperse y ojalá que sean más”.

De cara a mantener esa buena racha personal y grupal, el 10 volverá a ver acción el próximo sábado, 8 de febrero, desde las 8:00 p. m. (hora Colombia), con transmisión del canal nacional Win Sports.