CONTEXTO

Así será el metro

Después de años de estudios, discusiones y dudas, este sistema de transporte, que promete hacerle más fácil la vida a los capitalinos, está a punto de ser una realidad en la ciudad.

17 de noviembre de 2017
Las obras arrancarán en 2019 y en 2024 entrará en funcionamiento la primera fase. | Foto: Alcaldía de Bogotá

Después de revisar los estudios que se han llevado a cabo desde 1996 hasta el presente año, como el que hizo recientemente la consultora Systra en 2016, la Empresa Metro de Bogotá determinó que la alternativa más viable para la inversión de su presupuesto es la construcción de un metro elevado. Además de un ahorro de 46 millones de dólares por cada kilómetro con respecto a la alternativa subterránea, las principales razones que motivaron esta decisión son la calidad de los suelos bogotanos y la presencia de redes de servicios públicos desconocidas.

Su diseño contempla cada detalle de la primera línea de este sistema de transporte y el inicio de su ejecución está programado para 2019, con el objetivo de que en 2024, cinco años después, esta primera fase entre en funcionamiento.

La estructura consiste en un viaducto elevado a más de 13 metros, con casi diez metros de ancho, sobre el que harán su recorrido inicialmente 23 trenes eléctricos y automáticos. Cada detalle del diseño se integra en una estrategia de optimización de recursos, como lo son la incorporación de arquitectura bioclimática en todas las estaciones, reflejada en el uso de luz y ventilación natural, así como la utilización de energías limpias para el funcionamiento de los trenes.

La primera fase

Las primeras intervenciones serán obras menores que consisten en el traslado anticipado de redes; es decir, la reubicación de 23 kilómetros de redes de acueducto y alcantarillado, así como siete líneas de energía. Este trabajo es concertado con la Empresa de Acueducto de Bogotá y Codensa.

Se proyecta que para comienzos de 2020, la construcción de la primera línea habrá avanzado 30 por ciento dividida en seis frentes de trabajo. En ese mismo año, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) estima que la capital colombiana concentrará una población aproximada de 8,3 millones de habitantes, quienes se verán beneficiados por el que podrá ser considerado como el proyecto de infraestructura más importante del país.

Esta primera fase tendrá su punto de partida en el sector El Corzo (en Bosa) donde estará ubicado el patio taller, y llegará hasta la calle 78, a la altura de la Avenida Caracas (ver recuadro). Cada estación estará vinculada a edificios laterales con pasarelas, lo que garantiza que el espacio público no se verá reducido. En estos puntos de acceso se prestarán servicios complementarios para los usuarios, como taquillas, Cades, baños y espacios comerciales, entre otros.

Foto: Alcaldía de Bogotá

Continuidad garantizada

Uno de los grandes respaldos para la construcción del metro de Bogotá fue la aprobación de la solicitud de las vigencias futuras por la totalidad de los recursos financieros necesarios. La decisión estuvo en manos del Concejo de Bogotá durante un debate que concluyó el 31 de octubre. Esta solicitud, correspondiente a 6,08 billones de pesos, pretende sumar recursos a los 1,1 billones de pesos que componen el presupuesto actual. Por su parte, el gobierno nacional entregará 15,1 billones. Esta es la luz verde para su financiación completa. La primera vez que esto ocurre con un proyecto de metro.