George Santos: la historia del drag queen que, con una historia de vida falsa, terminó como congresista en Estados Unidos

Ni el más creativo de los guionistas habría sido capaz de imaginar una historia sazonada con tantos ingredientes: George Santos es un inmigrante latino y homosexual con fraudulentos títulos universitarios, una inexistente carrera en Wall Street, falsos orígenes judíos y un doloroso (y también en duda) pasado que vincula a su madre con el atentado de las Torres Gemelas. Pero nada de eso impidió que se convirtiera en congresista en Estados Unidos.

La victoria de Santos, hijo de inmigrantes brasileños nacido en Queens, ayudó al Partido Republicano a asegurarse una estrecha mayoría en la Cámara de Representantes al ganar una banca por un distrito de Nueva York en las elecciones de mitad de mandato de noviembre.

Sin embargo, al poco tiempo de su elección, en noviembre de 2022, reconoció que había inventado partes significativas de su CV: que no se había graduado de la universidad, ni había trabajado en el Citigroup Bank y en el Goldman Sachs Investment Bank, a pesar de haber afirmado lo contrario.

Y aunque hasta allí todo suena de película, hay más: su nombre es falso y, pese a que lo ha negado en reiteradas ocasiones, por estar afiliado quizás a la orilla más conservadora de la política estadounidense, todo apunta a que este brasileño vivió una doble vida pues hay imágenes que lo muestran, al menos durante tres años, como un curioso personaje de la escena drag en su país.

Todo comenzó a desmoronarse, en diciembre pasado, producto de una investigación de The New York Times que lo llevó a admitir que gran parte de los datos sobre su vida eran inventados. Sin embargo, se negó a dimitir.

Como si fuera poco, en medio del gran escándalo de una hoja de vida falsa —y con una parte de la prensa dedicada a esculcar su vida— el representante Santos tuvo que salir a negar otro capítulo controvertido de su historia personal: que perteneció a la escena transformista de Brasil.

En un comienzo negó que se hubiera vestido de mujer para participar en fiestas. Pero, la presión de los medios lo llevó a reconocer que sí lo había hecho, aunque solo una vez.

No obstante, una serie de imágenes que están circulando en redes sociales parecen demostrar lo contario.

Las acusaciones de que Santos se presentaba como drag surgieron por primera vez la semana pasada, cuando la periodista independiente Marisa Kabas publicó la historia en una publicación de Substack, una plataforma que difunde boletines informativos o newsletters.

Una larga historia

Kabas habló con Eula Rochard, drag queen y examiga del ahora congresista, quien compartió una foto que parecía mostrar a Santos con un vestido de plumas rojas, joyas y una peluca negra.

Según Rochard, la foto fue tomada en 2008 en el Desfile del Orgullo en la playa de Icaraí en Niterói, una ciudad ubicada al lado de Río de Janeiro, cerca de donde vivía Santos en ese momento.

Rochard luego compartió más fotos de lo que parece ser Santos disfrazado, y le dijo a Kabas que lo conoció cuando era un adolescente bajo el nombre de Anthony Devolder, dos de sus nombres de pila, y Kitara Ravache, su nombre de drag queen.

Santos inicialmente negó la acusación de ser una drag queen en Twitter: “La obsesión más reciente de los medios de comunicación afirmando que soy una drag queen o que ‘actué’ como una drag queen es categóricamente falsa”.

Pero, ante la contundencia de las imágenes, el congresista apareció posteriormente para confirmar la autenticidad de las fotos, con una salvedad: “No era una drag queen. Era joven y me divertía en un festival. Demándenme por tener una vida”, aseguró en ese momento.

Y la cosa habría terminado allí de no ser porque comenzaron a aparecer videos previos a 2008, lo que sugiere que Santos puede haber hecho apariciones como drag con más frecuencia de la que asegura.

The New York Post compartió un video de lo que parece ser Santos en el primer desfile del orgullo de Niterói, en 2005, hablando en portugués con un reportero sobre todos los lugares gay en los que se había presentado. El periodista del video, Joâo Fragah, le dijo a NBC News que estaba muy seguro de que Santos —ataviado con gafas de sol y un vestido negro— era la persona a la que entrevistó.

Lo que coincide con Eula Rochard, la examiga, quien le dijo a la agencia de noticias que en 2005 Santos era una drag queen “pobre” que generalmente vestía un sencillo vestido negro.

En ese momento tendría unos 17 años.

Esa, al parecer, era también la edad que tenía en otro video publicado por el programa de actualidad brasileño Fantástico, la semana pasada, que muestra a Santos con un vestido rojo de plumas en el Desfile Gay de Niterói en 2007.

Los videos y las fotos, que abarcan desde 2005 hasta 2008, indican que Santos pudo haber estado vistiéndose como drag en eventos durante varios años, a pesar de que negó haber sido alguna vez una drag queen.

Santos, que es gay, ha recibido críticas por su pasado como drag queen después de que se alineó cada vez más con legisladores republicanos de extrema derecha, algunos de los cuales han acusado a las drag queen de manipular a niños.

También apoyó el proyecto de ley de derechos de los padres en la educación de Florida, que los críticos han calificado como el proyecto de ley No digas gay, una legislación que tiene como objetivo restringir la enseñanza de la orientación sexual y las cuestiones de género en los jardines infantiles y las escuelas primarias.