TRENES

El primer tren automático de Colombia estará en Rionegro

Tendrá 16,7 kilómetros de recorrido y podrá transportar 49.000 pasajeros al día. La licitación inició el pasado 13 de agosto y se adjudicará el 16 de diciembre de 2019.

20 de octubre de 2019
La empresa seleccionada será la encargada de elaborar los estudios y diseños definitivos de la obra, financiarla, ejecutarla, operarla y mantenerla. | Foto: Cortesía Somos

A 45 kilómetros de la ciudad de Medellín está Rionegro, un municipio con una extensión de 196 kilómetros cuadrados que crece aceleradamente. Su cercanía con la capital de Antioquia, los numerosos proyectos de vivienda, y ser la sede del Aeropuerto Internacional José María Córdova, lo han obligado a ser cada vez más competitivo y a contar con un sistema de transporte público que sea eficiente, sostenible e incluyente.

Por eso, y con el propósito de mejorar la calidad de vida de sus habitantes, la compañía Somos, una empresa del municipio de Rionegro, ciento por ciento pública, dio inició al proceso de licitación del Tren Automático de Rionegro el pasado 13 de agosto de 2019. La licitación, que será adjudicada el 16 de diciembre de este año, tiene un valor de 1,6 billones de pesos. La empresa seleccionada será la encargada de elaborar los estudios y diseños definitivos de la obra, financiarla, ejecutarla –cumpliendo con los parámetros sociales, prediales y ambientales–, operarla y mantenerla.

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Este tren automático, que será el primero del país, tendrá 16,7 kilómetros de recorrido. Estos iniciarán en el sector de Belén (a la altura de la autopista Medellín-Bogotá) y culminarán en el Aeropuerto José María Córdova. Además, contará con 11 estaciones, cada vagón podrá transportar 150 personas, tendrá la capacidad de movilizar cerca de 49.000 pasajeros al día y su velocidad promedio será de 38 kilómetros por hora.

El alcalde de Rionegro, Andrés Julián Rendón Cardona, celebra esta obra: “Hoy somos cerca de 130.000 rionegreros que ocupamos un espacio donde cabe tres veces el conglomerado urbano que se forma desde Bello hasta Envigado, en el Valle de Aburrá. Estamos seguros de que este sistema le va a servir a la ciudad en los próximos 100 años. Las obras hay que pensarlas con suficiente antelación, de lo contrario, cuando realmente las necesitemos, no podremos ejecutarlas. El ejemplo de Bogotá es ilustrador”.